Punto G: Una búsqueda y una oportunidad
De "El Amante" de Marguerite Duras:
- Lo que quiero es que me lleves al orgasmo - ¿Cuántas veces? - Las veces que mi cuerpo lo permita - ¿y cuántos dedos quieres? - Los que mi cuerpo acepte - ¿Y a qué profundidad quieres que llegue? - Tan hondo como puedas penetrarme
Durante un tiempo se pensó que la existencia del Punto G se trataba solo de un mito. Hoy día se sabe que es real, que efectivamente existe dentro del cuerpo de la mujer. Muchos incluso lo siguen considerando un mito por la dificultad que suele causar su localización.
La cuestión era más simple de lo que parecía y hoy podemos afirmar que el Punto G es una continuidad del clítoris por dentro de la vagina. El clítoris es mucho más de lo que está a la vista.
La zona del Punto G constituye una protuberancia rugosa que se alcanza aproximadamente a cinco cm de la entrada de la vagina en su pared anterior, es decir delantera. Su estimulación desencadena una muy intensa sensación.
La descripción es sencilla pero su búsqueda y hallazgo, no tanto. Su localización precisa varia de una mujer a otra. Es por eso que el proceso hasta encontrarlo puede convertirse en una muy agradable oportunidad de exploración.
Si estás pensando iniciarte en esta búsqueda te cuento que precisarías dedos muy largos para hallarlo vos misma. Es más efectivo hacerlo con la ayuda de tu pareja intentando con un dedo levemente inclinado hacia adelante en su parte superior o penetrando con el pene alcanzando mayor profundidad, sentada sobre él.
Toda esta experiencia es un buen ejemplo que nos demuestra una vez más que en el sexo el camino puede ser tan o más interesante que el fin.